¿Piensa Positivo?

Pensar positivo. Esa parece ser la clave de todo.

Pero ¿Qué pasa si la vida nos va demostrando lo contrario?

Lo sé, sueno la persona más negativa y pesimista… pero resulta que estoy harta y siento que tengo motivos de sobra para dejar de sentir que la vida es color de rosa o que eventualmente podría serlo.

(Mírele el lado amable a las cosas)

El lado amable.

Cuando pides descanso, se avecinan un sin fin de responsabilidades.

Cuando tienes ganas de querer a alguien, no puedes… porque ese alguien no quiere que lo quieras del modo en que deseas quererlo (sonó enredado).

Cuando pides trabajar con gente con algo de sentido común, no falta la piedra en el camino.

Cuando quieres que por fin acaben los problemas, te das cuenta que vienen mucho más.

Pero ahí está el Piensa positivo que aunque desees bajar los brazos te persigue y se repite una y otra vez, para no decaer.

Quisiera creerle a mi vieja cuando me dice que “tanto problema nos llevará a algo bueno en el futuro”. Por favor que tenga razón.

Estoy harta de estar a la altura de las circunstancias, pero aún así me siento gratificada por ello. Agradezco tener la paciencia que tengo y agradezco que en algún momento de mi vida me hayan enseñado a no rendirme.

Al lavado

Si hay algo que ensucia las palabras, pensamientos y relaciones es la señorita mentira.

No hay cosa más asquerosa que ella. La pobre es fea y no tiene arreglo. Por más que la mentira se vista de excusas, mentira se queda.

En medio de un trabajo quise tomarme un tiempo. De pronto esos tiempos son necesarios para aclarar la mente y decir ‘vamos que se puede’ (a pesar de todo); y seguir con la mente despejada haciendo lo que pensaste que terminarías hace una hora atrás. Y el freno a mi trabajo fue la señorita antes mencionada.

¿Seré ingenua?

Siempre pienso en que la gente puede equivocarse, pues claro todos somos seres humanos y todos podemos tropezar. Pero ¿qué pasa si ese tropiezo es constante? ¿Qué pasa si en medio de un buen discurso comienzan las contradicciones?

Y que pasa con uno que se da cuenta que intentan ‘hacerte lesa’… y te das cuenta que de pronto la gente puede verte como la persona más imbécil del planeta, ‘la que se traga cualquier cuento’ y te pones a pensar en cuantas veces te han hecho lesa. Y eso es lo peor, porque comienzas a sentirte tonta de verdad. Tonta por creer que de verdad aprecian tú trabajo, tonta por creer que de verdad las personas no buscan sólo un ‘bien personal’ y que en algún grado la palabra equipo la tienen presente y la respetan.

Pero no, aterrizas y te das cuenta de que ese es un sueño que inventas para no decepcionarte de las personas, para no pensar que hay personas malas.

Las excusas se ven bien, pero cuando cubren mentiras, por pequeñas que sean, aún tienen un dejo de suciedad (y la suma de pequeñas mentiras…una mancha ¿Qué se quita?). Y querámoslo o no, hay que lavarlo, quitarlo o desecharlo si ya no tiene arreglo. Pero mientras estas en medio de la lavadora, con esos giros que marean a cualquiera, tienes que saber como pararte para no vomitar y ensuciar aún más.

SCA

a falta de cable, bueno es youtube

Amigos

Así de simple suena, pero así de complejo son.

Complejo porque son nuestros confidentes, acompañantes… una especie de pololos, sin la necesidad de que lo sean (además hay cosas que a los pololos no se les puede contar, esa onda).

Para el día del cine me junte con 3 amigos distintos y a distintas horas. Me di cuenta de la gran diferencia entre cada uno y lo raro que es que personas tan distintas logren el mismo nivel de amistad.

Tengo distinto tipos de amigos:

- Yo soy popular: es la típica amistad en que la otra persona es quién ‘el mundo’ conoce, quiere y estima. Y gracias a esa amistad una, la niña antisocial, conoce a personas que ‘ni en pelea de perros’ conocería solita.

- La timidez es mi lema: esta amistad es la que, en mi caso, me comprende. Compartimos las mismas vivencias, entendemos planchas que nadie más entendería y nos reímos de eso.

- Mateo (a): últimamente no me he topado con Mateos o mateas que uno diga ‘que bruto que sabe’… pero en el colegio tenía una compañera que era así, la reina de los 70 y 69. Personaje que te ayuda y hace mil y un intentos de que te vaya bien y una ahí tratando de que sus esfuerzos de ‘profe’ no sean en vano.

- De carrete: para una la niña antisocial hay pocos carretes para asistir. Generalmente porque resulta ser una lata y un esfuerzo más "tener que sociabilizar". Y ahí esta la amiga que te dice 'pero vamos, si será bakan... y si no te gusta nos vamos'... pero una sabe que si no te gusta, jodiste, porque tu amiga de carretes no se irá solo porque a una le parece fome, no señores. Nunca hay que creer dicha frasecilla. Pero a veces no es tan malo, te pillas con buenos carretes y 'despejas la mente' un rato.

- Música y películas: acá es donde una tiene su partner para las tocatas, se envía mp3 y abundan las frases tales como "uuuuuhh tengo este disco! Te lo mando” / “uuuhhh supe de esta tocata, vamos!” /“uuuhhh cachaste el nuevo video de…” /“uuhhhh encontré un grupo nuevo que te va a gustar” /“uhhhh tenemos que ir a ver esta película” /“uhhhh cachaste el personaje que salía en esta película, es igual a mí…” y etc.

- De la infancia: Quizás es la amistad más fuerte y cercana. No cualquiera sabe como eras a los 5 años y como pasaste tu adolescencia y como vas creciendo. Ves como cada cual toma su rumbo en esta cosa llamada vida y aún permanece. Y sueñas con que serás viejecilla y aún tendrán cosas por compartir.

Al final ¿Qué seria de nosotros sin amigos?

[buh, esto iba con fotos... no me dejo, maldito blog]