Diario de una soltera
No seré Pamela Díaz, pero tengo mi diario también. Y qué mejor que El diario de una soltera (al menos aún no caigo en el rango de “solterona”) . Veamos…
Lo típico que te preguntan es: ¿Y estay pololeando? O en su defecto ¿Cómo va tu vida amorosa? (que es aún más amplio y terrorífico)
Y una responde con un temido y en volumen semi-bajo “no” o en su defecto “va piolita, tranquilo… solitario”.
Y te empiezas a preguntar ¿Por qué estoy tan solita?
Y las respuestas asoman: “humm, es que quizás soy muy exigente” – “humm es que no ha llegado el indicado” (que mula, parece que nunca aparece) – “humm es que no me pesca” (y esa si que duele) – “humm es que a los hombres les gustan fáciles y huecas” (dijo la pica).
Y te empiezas a preguntar ¿Por qué estoy tan solita?
Y las respuestas asoman: “humm, es que quizás soy muy exigente” – “humm es que no ha llegado el indicado” (que mula, parece que nunca aparece) – “humm es que no me pesca” (y esa si que duele) – “humm es que a los hombres les gustan fáciles y huecas” (dijo la pica).
La pregunta real es: ¿Por qué te permites estar sola?
Para que estamos con cosas, a nadie le falta Dios (como dice aquel dicho). Pero el peor es nah parece ser insuficiente. Tengo el gran problema de obsesionarme, sólo un poco, con el ser-gustado (amado es demasiado grande). Y si me gusta uno, es ese y nadie más. Y he ahí el error, pareciera que otras ofertas simplemente pasan por el lado y son desechadas. Es como cuando vas a comprar ropa, o al menos a mi me pasa, si no es esa polera, no es ninguna. Tengo que juntar la plata, aunque cueste y comprarla. Sino típico que la que me compraría, por solo tener una polera nueva, no me queda bien o andaría tirada por ahí.
Gran teoría esa que me dijeron una vez, los hombres son como las poleras. Se tiene que ajustar bien a una, sino imposible ponérsela y mantenerla actual en el closet (en vez de arrumada por algún lado que olvidarás).
En fin… ojala que encuentre una polera que me quede bien, porque acaban de sacar de la tienda la que me gustaba, otra la compro antes, y simplemente no alcancé. Que fome.
Para que estamos con cosas, a nadie le falta Dios (como dice aquel dicho). Pero el peor es nah parece ser insuficiente. Tengo el gran problema de obsesionarme, sólo un poco, con el ser-gustado (amado es demasiado grande). Y si me gusta uno, es ese y nadie más. Y he ahí el error, pareciera que otras ofertas simplemente pasan por el lado y son desechadas. Es como cuando vas a comprar ropa, o al menos a mi me pasa, si no es esa polera, no es ninguna. Tengo que juntar la plata, aunque cueste y comprarla. Sino típico que la que me compraría, por solo tener una polera nueva, no me queda bien o andaría tirada por ahí.
Gran teoría esa que me dijeron una vez, los hombres son como las poleras. Se tiene que ajustar bien a una, sino imposible ponérsela y mantenerla actual en el closet (en vez de arrumada por algún lado que olvidarás).
En fin… ojala que encuentre una polera que me quede bien, porque acaban de sacar de la tienda la que me gustaba, otra la compro antes, y simplemente no alcancé. Que fome.
p.d: fuera de leseo, esta bonita la polera de la foto. Buena google.
p.d2: he sabido de gente que lee mi blog y son personas que tienen buenas opiniones. Lo invito a animarse y escribirme, total ¿Que pierde?. Además que gano mucho con su opinión. Si no es acá, que sea en otro post. Pero la invitación está hecha, no diga que no le dije.
posted by kalubea at 12:09 AM
4 Comments:
Lindo estampado en la polera, y ese detalle me hace pensar que tal vez la soledad es por este mismo motivo, la falta de adornos que nos asombren en la prenda que necesitamos, y nótese que afirmo "necesitamos" y no lo que buscamos, pues como dicen el que busca nunca encuentra y ya estoy aburrido de tanto mirar y cotizar las prendas que tal vez nunca me van a sevir.
Buena analogía lo de las poleras y el amor, me gustó leer tu blog, un gran acierto!! llegué medio ramificado hasta tu sitio y menos mal, no fue una pérdida de tiempo.
Suerte desde la iluminada estrella *SPICA
Mi mamá me lo dijo una vez, el día que te guste un hombre será ese y ninguno mas, porque yo era igual de pegada con lo primero que llamaba mi atención, tenía que ser eso o no era nada. Así también me pasó en el plano amoroso, muchas veces, debía ser aquel en el que me había fijado, quizás no era el con mejor apariencia, pero era el que me gustaba a mi.
jejeje
buena acotación de las poleras, el hombre tiene necesariamente que ajustarce a uno y viceversa
saluditos kalu
me gusto la metafora de las poleras, pero recuerda algo la ppolera qe te gusta (tiempo presente) puede volver a salir y posiblelmente en liquidacion , asi que tienes que estar alerta. muy alerta, por lo que tienes que estar pendiente.
yop
alerta, pendiente... porque hay que estar alerta.
jaja, lo siento... es que te salio enredao.
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